El ex-entrenador de la selección Colombia de fútbol, Francisco Maturana, además de llevar al equipo a dos mundiales, será recordado por la frase: “Perder es ganar un poco”. Aunque en su momento fue criticada, hay muchas áreas en las que esta afirmación tiene valor, y el emprendimiento es una de ellas.
Algunos errores al emprender incluyen no ser perseverante, fallar en la planeación de la estrategia o no sistematizar los procesos.
Durante el Eleva Summit 2025, un evento de aceleración de emprendimiento realizado por la Facultad de Administración de la Universidad de los Andes, cinco emprendedores hablaron de errores adicionales que han cometido y de los que aprendieron una lección:
No dejar ir a las personas
Saber en qué momento dejar ir a algunas personas que ya no coinciden con la visión de la empresa fue una enseñanza que le quedó a Cristian Villamizar, cofundador de Duppla, una startup que ofrece un modelo de renta de vivienda con opción de compra.
“Yo creo que, al principio, cometía el error de darle muchas largas a ese momento en el que tiene sentido dejar ir a alguien. Y me costó trabajo entender que muchas veces es mejor hacerlo antes, porque le permite a la persona crecer en otro lugar y a la organización encontrar a alguien idóneo para lo que se necesita en ese momento”, señala Villamizar.
No escuchar al cliente
“Tenemos que escuchar las necesidades del mercado; nuestros clientes nos dicen qué es lo que necesitan, dónde lo necesitan y nosotros debemos enfocarnos en resolver esos problemas”, dice Sebastián Uribe, CEO y fundador de Xential, una empresa de medición de espacios y soluciones logísticas.
En la misma línea, Andrés Felipe Díaz, cofundador de Holly, una aplicación para el manejo de emociones, menciona que su equipo se enfocó más en la solución que en el problema, desatendiendo a los usuarios sin comprender sus necesidades. Andrés adapta un viejo dicho: “Ponerse en los zapatos del usuario”.

Entrar con prudencia a una industria
“Cuando entremos a una industria nueva, por más atrayente y rentable que parezca, es bueno revisar bien y entrar con cautela”, recomienda David García, de Prami, un emprendimiento del sector salud que financia tratamientos médicos.
Enamorarse ciegamente del producto
Ciro Gélvez, CEO de Wseeds, una empresa de tecnología para el sector agropecuario, dice que, como científico, veía la tecnología de otra forma: “Empezamos a enfocarnos primero en mejorar nuestros sensores, en los datos que tomábamos, en que cada vez tuviéramos más funcionalidades dentro de la aplicación que estábamos construyendo y nos desviamos de la meta principal: resolver rápidamente el problema del productor”.
En esa búsqueda de mejorar su producto, descuidaron aspectos del día a día de los agricultores, como el clima. Ahora trabajan de la mano con los productores, conociendo mejor sus realidades y teniendo en cuenta esas variables en su tecnología.
Aprender de los errores es clave en el camino del emprendimiento, y evitar estos fallos puede hacer la diferencia entre el éxito y el fracaso.
La capacidad de aprender de los errores, ajustar estrategias y mantener la flexibilidad distingue a los emprendedores que logran sostener sus negocios en el tiempo.